MADRID (Reuters) – El Tribunal Supremo procesó el viernes por rebelión al expresidente catalán, Carles Puigdemont, y a otros 12 ex altos cargos de partidos y entidades independentistas por su papel en el proceso secesionista de Cataluña de los últimos años, en una causa que eleva a 25 el número total de procesados por otros delitos asociados.
«En su auto el juez relata los hechos acontecidos en Cataluña en los últimos 6 años en relación con el proceso secesionista, en lo que considera un concierto entre partidos políticos y entidades soberanistas para llevar a cabo la ejecución de un plan predeterminado con el objetivo de declarar la independencia de Cataluña, al margen de la legalidad vigente», dijo el Tribunal Supremo en una nota de prensa, citando el auto.
Entre los 13 procesados por rebelión están también el expresidente catalán Oriol Junqueras – en prisión provisional- y otros siete exconsejeros de su govern, así como la expresidenta del Parlament Carme Forcadell y los líderes de las organizaciones Asamblea Nacional Catalana (ANC) Jordi Sànchez, el de Omnium Cultural, Jordi Cuixart, al igual que la secretaria general de ERC, Marta Rovira, que el viernes anunció su marcha del país.
El juez procesó por malversación de caudales públicos y desobediencia a otros 5 exmiembros del gobierno catalán y por desobediencia a cinco exmiembros de la Mesa del Parlament catalán, así como a las políticas de la CUP Mireia Boya y Anna Gabriel.
El juez, que añadió el delito de malversación para los 9 exmiembros del gobierno autonómico procesados por rebelión, fijó una fianza conjunta de responsabilidad civil de 2,1 millones de euros para los 14 exmiembros del Gobierno catalán procesados.
El magistrado calculó la fianza considerando que 1,6 millones fueron empleados para sufragar el referéndum de independencia del pasado 1 de octubre.
Con la marcha de Rovira se eleva a seis el número de procesados que han optado por el exilio en distintos países – Bélgica, Suiza y Reino Unido – para huir de la justicia española.